Situado en Puerto Escondido, Oaxaca, el arquitecto Alberto Kalach presenta su más reciente creación: el hotel boutique Casona Sforza. El enfoque central de este proyecto resalta la importancia de la conciencia y la apreciación de la belleza de un entorno en armonía. El diseño, la elegancia y el compromiso con el medio ambiente se combinan en un lugar excepcional donde el confort y la exclusividad son prioritarios sin exageraciones.
Situado en el apacible entorno de Barra de Colotepec, con vistas a las doradas playas del Pacífico, el hotel Casona Sforza se distingue por su arquitectura única, inspirada en la tradición local. Ofrece una experiencia de lujo sostenible, centrada en la atención personalizada, la exclusividad y la privacidad. En este contexto armonioso con la naturaleza, el concepto del hotel resalta la importancia de la conciencia, al mismo tiempo que permite disfrutar de la gastronomía regional y contribuir al fortalecimiento de los vínculos con la comunidad local.
Casona Sforza es una iniciativa del empresario Ezequiel Ayarza Sforza en colaboración con el reconocido arquitecto mexicano Alberto Kalach. Se caracteriza por su arquitectura que celebra las tradiciones culturales del país y demuestra un fuerte compromiso con la preservación del entorno natural. Su diseño presenta líneas depuradas, asimetrías, arcos y bóvedas que armonizan de manera notable con el paisaje de Puerto Escondido.
En esta ubicación en la costa de Oaxaca, donde se encuentran el río Colotepec y el mar, la comodidad y la elegancia sin adornos se fusionan con un profundo respeto por el medio ambiente. En este entorno, la naturaleza y el diseño trabajan juntos para estimular los sentidos. En sus espacios luminosos, que presentan tonos terracota, y su terraza con una piscina de círculos concéntricos, el tiempo transcurre de manera relajada entre cipreses, manglares y encinos, sin prisas ni agobios.
En 2023, Alberto Kalach rediseñó un proyecto paisajístico que honra un ecosistema singular en esta zona, haciendo uso de otras variedades vegetales autóctonas como majaguas, tabachines, mezquites y huizaches, además de los característicos cactus de la región. Introdujo plantas como Zisus y Copa de Oro, junto con arbustos adicionales, que ofrecen sombra y frescura, al mismo tiempo que definen distintas áreas y fomentan la privacidad.
Las 11 suites, con techos de bóveda característicos, brindan un espacio de retiro donde se puede experimentar un ambiente bohemio relajante. Se refleja este ambiente a través de texturas naturales, muebles elaborados en maderas tropicales y una paleta de colores que se basa en tonos neutros. Estas suites se dividen en tres categorías: Junior, Senior y Master, y ofrecen a los huéspedes vistas panorámicas y comodidades que evocan la sensación de estar en casa
En Casona Sforza, el diseño interior exhibe la artesanía procedente de diferentes regiones del país, como las lámparas de palma de Jalisco, las alfombras de Teotitlán del Valle, los textiles del Valle de Oaxaca, y elementos como hamacas, sillas y cortinas de Yucatán, por mencionar solo algunos ejemplos. El ambiente se enriquece aún más con detalles y comodidades provenientes de la sierra oaxaqueña, elaborados por los talleres de transformación comunitaria de Pueblo del Sol.
En este lugar, alfareros, ceramistas, carpinteros, agricultores y apicultores están comprometidos con la promoción de prácticas sostenibles. Todos comparten la misma visión de crear un futuro más sostenible gracias al apoyo y la colaboración de Casona Sforza. El hotel, a su vez, ofrece a sus huéspedes la oportunidad de explorar proyectos relacionados con la agricultura orgánica, como el cultivo de café, vainilla, cacao y producción de miel. También se pueden descubrir artesanías que incluyen cerámica, carpintería, productos de cosmética natural, técnicas de bioconstrucción y joyería, además de participar en talleres de yoga, meditación y sanación.
Como parte integral de la experiencia que ofrece Casona Sforza, su nueva propuesta gastronómica, liderada por los chefs venezolanos Vanessa Franco y Andrés Trujillo, se encuentra influenciada por los productos de la tierra y el mar. Colaborando estrechamente con granjas y cooperativas locales de Puerto Escondido y sus alrededores, estos chefs y su equipo demuestran un firme compromiso con la sostenibilidad. De esta manera, permiten que la temporada y el entorno natural orienten las creaciones culinarias que ofrecen a diario.
La completa inmersión en la serenidad del entorno se prolonga a través de servicios de bienestar que se centran en rejuvenecer el cuerpo, la mente y el alma. Enfrente de las olas del mar, los huéspedes pueden deleitarse con experiencias como masajes relajantes y sesiones de reiki. Casona Sforza despierta los sentidos a través de un lujo consciente que brinda la oportunidad de escapar del bullicio de la vida cotidiana. Ya sea disfrutando de paseos tranquilos, participando en expediciones, tomando clases de surf o presenciando el avistamiento de delfines, ballenas y tortugas marinas, todo contribuye a esta experiencia.
Fuente: diariodesign.com
