La propuesta para la casa CH73 en Bosques de las Lomas, tuvo como objetivo aprovechar la normativa del área como una oportunidad para desarrollar una vivienda singular con una perspectiva sustentable. Este enfoque desafió las convenciones de construcción establecidas en la zona, incorporando plataformas de concreto con vegetación que canalizan las aguas pluviales hacia el sistema municipal. Esto resultó en una reducción de la infiltración de agua en el subsuelo y un impacto negativo en la flora y fauna autóctonas del lugar.
La residencia CH73 abarca una extensión total de 1,023 metros cuadrados. Su diseño arquitectónico se origina en dos aspectos fundamentales. Por un lado, se ajusta a las normativas que requieren mantener una distancia de 5 metros alrededor de todo el perímetro del terreno debido a su proximidad con una reserva federal en la parte oriental.
Por otro lado, la existencia de un muro de contención, situando la mitad de la propiedad 30 metros más baja que la vialidad, condujo a la concepción de la vivienda como una estructura diáfana en voladizo, ofreciendo vistas interesantes con una clara separación entre el espacio utilizado y el área de servicio.
El diseño estructural se logra mediante una estructura de acero que extiende una proyección de 20 metros sobre la barranca, permitiendo aprovechar completamente el terreno. Esta estructura se sustenta en tres muros de carga de concreto que conforman el sótano, cuya cimentación se realiza a través de pilas geotérmicas utilizadas para la generación de energía eléctrica. Estas pilas no solo contribuyen al acondicionamiento térmico de la casa en invierno, sino que también calientan la piscina durante el resto del año con el respaldo de una bomba de calor.
En cuanto al manejo del agua, se ha implementado un sistema biodigestor para tratar las aguas residuales, destinando el agua tratada a la irrigación de la zona federal y canalizando el agua pluvial al subsuelo para mejorar las condiciones de flora y fauna en la degradada zona boscosa.
En el interior, las fachadas protegidas y ventiladas ofrecen un entorno iluminado y aireado, con vistas panorámicas hacia las cañadas. Los espacios son versátiles y pueden ajustarse fácilmente a los cambios o requerimientos de los clientes.
Como parte del proceso de reforestación, se optó por plantar especies autóctonas como el tepozán, ocote y árboles aguacateros, específicos para la fauna, junto con otras variedades arbóreas que habían crecido naturalmente en la plataforma preexistente y desatendida del terreno.
Todas estas estrategias de diseño nos condujeron a lograr un factor Net-Zero, permitiendo que la residencia genere el cien por ciento de su energía eléctrica, al mismo tiempo que recicla y capta agua para reducir su consumo.
Descubre cómo la arquitectura sostenible cobra vida en la Residencia CH73. En Estudio Lofft, compartimos la misma pasión por la innovación y la calidad. Explora nuestro exclusivo catálogo de muebles e iluminación europeos para transformar tu espacio. ¡Haz de tu hogar un reflejo de diseño y sostenibilidad! Visítanos ahora para inspirarte.
Fuente: archello.com
