Ubicada en el frondoso paisaje de Valle de Bravo, México, Casa Ananda es una casa de descanso diseñada para una familia que redefine el concepto de espacio al difuminar las líneas entre las áreas públicas y privadas. La terraza —que se convierte en el punto focal del proyecto— actúa como un elemento arquitectónico que no solo divide, sino que también conecta los diferentes ambientes.
Dos volúmenes que dialogan con la naturaleza
El diseño de Casa Ananda se compone de dos volúmenes interconectados que exploran la dualidad y la flexibilidad de los espacios. La terraza funciona como un punto de transición entre el interior y el exterior, permitiendo que la casa se despliegue en torno a este espacio y fomentando una interacción constante entre ambos ambientes. La terraza puede ser un área privada para la reflexión y contemplación, o transformarse en un espacio abierto que se integra con el entorno natural.
Techo a dos aguas y un árbol que se queda
La distintiva cubierta a dos aguas no solo complementa el diseño arquitectónico, sino que también se adapta al clima y al paisaje local. Un árbol preexistente en el terreno fue integrado cuidadosamente en el interior de la casa, estableciendo un diálogo con el contexto y reflejando un profundo respeto por la naturaleza.
Luz, vistas y expansión visual
Todas las habitaciones de la casa cuentan con grandes ventanales que permiten la entrada de luz natural y ofrecen hermosas vistas hacia el jardín. Esta apertura refuerza la idea de una casa que no está cerrada sobre sí misma, sino que se abre al paisaje y al entorno verde que la rodea.
Una casa que trasciende lo convencional
Casa Ananda es un testimonio de cómo la arquitectura puede desafiar las convenciones y crear un espacio en constante evolución. Es un lugar donde las fronteras entre lo público y lo privado se desvanecen, y la terraza se convierte en un punto de encuentro y transición.
Fuente: www.archdaily.mx
